Basada en el cómic creado por Garth Ennis y Darick Robertson, la serie The Boys, producción de Prime Video, es un programa sobre unos superhéroes que abusan de sus cualidades.
Por Martín L. González*
Hay en el subgénero de superhéroes una sobre explotación del tema en los últimos años. Series, películas, videojuegos, caricaturas y otros medios han adaptado a personajes originales de los cómics, obteniendo en su mayoría resultados regulares o mediocres, en cuanto a calidad.
Dar el salto de las viñetas hacia otro medio resulta complicado, ya que no todo lo que sucede en las historietas necesariamente funciona en un formato audiovisual. The Boys, la serie original de Amazon Prime Video, es una de esa agradables excepciones.
Fiel al ambiente, la crudeza o el cinismo de las viñetas, dicho programa es capaz de tomarse ciertas libertades respecto a la obra original, y es aquí donde radica la funcionalidad de la serie.
Adaptando el cómic homónimo escrito por Garth Ennis y dibujado por Darick Robertson, The Boys nos muestra la historia de Hughie, un rutinario y nada especial chico, quien presencia cómo su prometida es asesinada mientras la sostiene entre sus manos.
El responsable de tal acto es A-Train, un superhéroe cuya habilidad es ser un velocista, y que pertenece a un grupo de superhéroes conocidos como Los Siete.
Tras dicho incidente, Hughie es contactado por Vought, la compañía detrás de todo el negocio de los superhéroes. Con la finalidad de mantener su nombre limpio, Vought ofrece una alta suma de dinero a Hughie a cambio de que este mantenga en silencio el fallecimiento de su pareja.
Ante dicha propuesta, Hughie se niega rotundamente motivado por la sed de justicia. Todo esto lleva a que Hughie conozca a Butcher, un misterioso hombre que le ofrece la posibilidad de hundir a Vought y hacer justicia a su difunta prometida.
Sin embargo, esto sólo será la punta de un iceberg de un universo lleno de oscuros secretos y ambiciones.
Con dos temporadas de ocho capítulos cada una, The Boys se ha convertido en una de las series preferidas del público y en un clásico instantáneo.
Su nivel de violencia gráfica permite que aquel realismo del que se ha buscado brindar a los superhéroes en más de una ocasión cobre especial relevancia. Y es que esta brutalidad que envuelve a los personajes se siente real y justificada porque la serie se toma el tiempo para explorar la psique y las motivaciones de los mismos.
Los deseos y decisiones de los superhéroes van acorde a su desarrollo durante los capítulos, evitando glorificarlos.
Otra de las interesantes propuestas de The Boys es que realmente no existen los héroes en este universo. Todos y cada uno de los personajes actúan bajo sus propios motivos, y no buscan un bien común, tan sólo siguen sus instintos con la intención de sentirse satisfechos.
Esto se ve reflejado constantemente cuando la serie enfrenta a los personajes más nobles ante situaciones que ponen en jaque su moralidad, llevándolos a cuestionarse hasta dónde están dispuestos a llegar para conseguir sus objetivos.
A pesar de enfocarse en aspectos más dramáticos para el desarrollo de la trama, la acción está bien ejecutada. Peleas, persecuciones y enfrentamientos son algo que si bien no son el enfoque principal de la serie, están presentes para mantener atrapado al espectador.
Resulta difícil encasillar en un solo género a The Boys, ya que utiliza comedia, sátira y suspenso. Pero sin duda la nota más alta que ha alcanzado radica en su evolución de personajes.
Todos los personajes, desde los principales hasta los secundarios están dotados de un buen arco argumental y realmente aportan algo a la historia, lo que evita que la serie esté llena de personajes innecesarios.
Con una tercera temporada ya confirmada, The Boys se ha convertido en una de las cartas fuertes de Amazon Prime Video.
*Colaborador y reportero de CinEspacio24 Noticias
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