«Diamantino», lo camp contra la intolerancia

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Diamantino es una cinta portuguesa que utiliza brillantemente la estética camp, para contarnos la historia de un ingenuo futbolista que tras perder su talento, una organización fascista lo obliga a realizar propaganda en contra de los inmigrantes.

Por Arturo Brum Zarco*

@arturobrum

Diamantino es el mejor futbolista del mundo, es un joven portugués que cuando está en un partido imagina a sus rivales como perritos gigantes con los que juega a que lo alcancen, y en lugar de los gritos y alaridos del público, ve diamantinas y sombras de color rosa por todo el estadio. Esa dulce e ingenua concepción la ha creado cada vez que está a punto de anotar un gol.

Un día antes de jugar la final de la copa del mundo, Diamantino se relaja en su yate, acompañado de su padre, un señor amable y que ama a su hijo, y de sus dos crueles y despiadadas hermanas. Sin embargo, ese día el prodigio jugador ve algo que lo impacta: una valsa llena de inmigrantes africanos.

Para Diamantino que ha vivido en un mundo color de rosa, y literalmente se imagina todo de dicho color, ver el sufrimiento de esas personas lo impacta de un modo abrupto. Se conmueve y descubre que no sabe nada de los problemas de la sociedad.

Tan grande es su consternación que al jugar la final, no logra concentrase y ver a esos perritos gigantes y la ambientación rosa que los acompaña. Se lesiona cuando esta a punto de anotar un gol y su país, Portugal pierde el campeonato.

En ese momento, su padre, quien era su representante, muere y sus codiciosas hermanas toman su lugar. Ellas le gritan a Diamantino y lo obligan a realizar una campaña de una organización ultra conservadora y fascista que desea que Portugal deje la Unión Europea y sus controles migratorios sean más estrictos.

Diamantino es un tipo ingenuo, torpe y dulce, que cree que sólo está haciendo un anuncio publicitario más. Además esa organización fascista quiere crear clones con las cualidades futbolísticas de Diamantino, y realizan experimentos con él que provocan que poco a poco le crezcan senos.

A la par de toda esta irracional historia, dos jóvenes lesbianas de la secretaria de hacienda de Portugal, investigan a Diamantino por lavado de dinero. Una de ellas se hace pasar por inmigrante y Diamantino la adopta.

De eso trata la loca, divertida y original cinta Diamantino, una obra de cine camp que muestra en su absurdo temas delicados que dañan a la sociedad, por ejemplo, la xenofobia, la discriminación, el regreso del fascismo y la manipulación de los medios.

Además, de una forma positiva y de una manera bella y sutil aborda la bisexualidad.

Protagonizada por Carloto Cotta, dicho actor realiza un gran trabajo al darle vida a un futbolista que es crédulo y tiene la mentalidad de un niño; un tipo con un gran corazón pero que es fácil manipular y convencer para que realice propaganda ultra conservadora, una metáfora de las espantosas prácticas que realizan este tipo de organizaciones.

La cinta, dirigida por Gabriel Abrantes y Daniel Schmidt, tiene secuencias de thriller y ciencia ficción, pero sobre todo cumple con un estética kitch que logra parodiar un deporte que la mayoría de las personas sólo lo conciben para hombres.

En su argumento y en su exagera y llamativa estética muestra el peligro de la avaricia, de la homofobia, de la intolerancia y el odio.

Una cinta hermosamente loca, con unos sub textos para analizar y debatir, y con unos dulces perritos gigantes que juegan futbol.