Te doy la bienvenida a esta serie de ensayos sobre el animé más popular del momento: Shingeki no Kyojin(SNK), en el camino hacia la presentación de la segunda parte de su temporada final, que se va a estrenar a principios de 2022.
El propósito de estos ensayos bebe de dos fuentes: compartir reflexiones de grandes pensadores, quienes aportaron algunas ideas que pueden leerse en nuestra clave actual, y además hacer una invitación a la curiosidad filosófica, a ayudarnos de la ficción para pensar nuestra moral y decisiones.
También hay que aclarar de una vez que estos ensayos están completos y rebosados de spoilers, por lo que si no has visto el manga o animé y te interesa, mejor no sigas leyendo; pero si no te importa, te doy la bienvenida. Comencemos.
La renuncia a la inmanencia
El final de historia de SNK la podemos interpretar como una renuncia a su propia inmanencia, en la que todas sus estructuras internas se trascienden, no hacía algo “bueno”, sino a un mundo fuera de las reglas anteriores que causaban sufrimiento. Seguirá habiendo sufrimiento, pero ahora de forma trascendental. Básicamente, sin dioses, solo humanos.
La inmanencia es aquello que es inherente a algún ser en el mundo que se encuentra inseparablemente unido a su esencia. En SNK tendremos varias ideas que son inmanentes en su mundo antes del final.
Comencemos por hablar del abandono.
Los tres niveles de abandono comunitario
Antes de la renuncia a la inmanencia, una condición esencial del mundo de SNK era el abandono, que lo podemos observar en tres niveles:
Histórico. Al principio de la historia se trata de un pueblo que solo recuerda los recientes 100 años de su existencia, y vive en constante negación de su pasado.
Esto conflictúa al pueblo en sí, que refleja su malestar por el desconocimiento en la generación de la Legión de Reconocimiento, y en la presentación de Erwin Smith, Hange Zoë, Armin Arlert y Eren Jaeger, personajes que tienen una curiosidad interminable por conocer los secretos de su mundo.
Social. En lo social se vive una anomia, que es la falta de regulación de una sociedad sobre sus individuos, pues no puede alinear objetivos claros con los deseos de las personas.
La cúpula actúa conforme a sus propios intereses con un rey títere que los deja ser injustos sin consecuencias; las Legiones, excepto la de Reconocimiento, privilegian el favoritismo y no los méritos, y los ciudadanos han perdido el sentido de comunidad, y aunque viven dentro de las murallas, se encuentran atomizados.
Ambiental. Consideremos a los titanes como una amenaza ambiental, tal como lo sería actualmente el COVID-19 o el calentamiento global, que en última instancia nos orilla a buscar refugio en lugares cerrados. En este caso, tres murallas gigantescas.
El riesgo ambiental es catastrófico debido a que, si una muralla es destruida, dependiendo de la densidad poblacional, puede ponerse en jaque toda la existencia humana, debido a los múltiples problemas que eso puede generar:
El genocidio completo de las personas por parte de los titanes.
Problemas para alimentar a los refugiados dentro de las murallas.
Cuando esto ocurre en la historia, el gobierno central decide mandar a los refugiados a “combatir” a los titanes, en una farsa para eliminarlos y que la población de las otras murallas pueda sobrevivir. En esta decisión vemos el culmen de la deshumanización a causa del abandono comunitario.
Cargando el peso del abandono
Estos tres niveles de abandono son los que vuelven mucho más interesante el universo de SNK y su diégesis, porque después del ataque del Titán Colosal, el peso se recarga por completo sobre los protagonistas, y en específico sobre Eren Jaeger.
Cuando avanza la trama y vemos que Eren puede tapar el agujero de la muralla, no solo intuimos que carga una enorme piedra, sino que en ella vemos el significado de renovar la energía social para comenzar a luchar contra los tres abandonos comunitarios, y habría que sumarle al protagonista el abandono familiar, tanto de su padre como madre, a un mundo que sin luchar te devora, ya sea quitándote las ganas de vivir o literalmente siendo devorado por monstruos sin conciencia.
En la siguiente reflexión comentaremos sobre el humor dentro de la fragilidad de la vida, o la socarrona risa de la muerte en SNK.
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