Crítica de la película Bestia, protagonizada por Idris Elba. El filme nos narra la travesía del doctor Nate Samuels por Sudáfrica, lugar que visita con sus hijas después de la muerte de su esposa, ahí son atacados por un salvaje león.
Por Martín L. González*
Bestia es una cinta dirigida por Baltasar Kormákur y protagonizada por Idris Elba, quien da vida al Dr. Nate Samuels, personaje que tras la muerte de su esposa decide viajar junto con sus hijas a Sudáfrica, lugar donde conoció a su pareja y donde pretende vivir una corta estancia con el fin de llevar su duelo de manera íntima.
Sin embargo, tras involucrarse en un safari liderado por Martín (Sharlto Copley), un viejo amigo del Dr. Nate, comenzarán a ser cazados por un feroz león que ha perdido a su manada a causa de la ferocidad de un grupo de cazadores, por lo cual ahora busca saciar su sed de sangre.
El asesino que funciona como el eje central de la historia, no es un tipo malo que busca acabar con alguien en específico, motivado por conseguir un beneficio propio, en esta ocasión el peligro latente proviene de un animal que ha sido víctima de la ambición humana.
Lo curioso es que a pesar de que la cinta cuenta con Idris Elba en el reparto principal, la película pocas veces recurre a darle un enfoque de icono de acción a su personaje, y eso no sólo dota de un aire refrescante al filme, sino que le brinda un abanico de posibilidades al mismo.
De esta forma, los momentos de mayor tensión buscan una resolución a través de todo el elenco y no sólo de un personaje que cargue con todo el peso de la cinta, como se esperaría de un proyecto encabezado por Idris Elba.
A pesar de ello, el filme entiende el estatus actual de este actor hollywoodense, dando pequeños destellos de acción desmedida donde él es quien funge como el estandarte de las secuencias frenéticas y los momentos físicos.
Esta mezcla particular de fórmulas probadas funcionan porque el cineasta juega con ellas según lo requiera la historia. Consiguiendo así un interesante viaje que danza con los planos secuencia, experimentando con las tomas cerradas y abiertas, a la vez que utiliza las locaciones a su favor.
Por todo esto el filme se convierte en la estructura exitosa de un blockbuster, ya que a pesar de que la cinta intenta (de manera fallida) buscar un enfoque melodramático e incluso dejar un mensaje social, en el momento en el que entiende que su fuerte se encuentra en la tensión que puede generar gracias a la naturaleza tan caótica de sus situaciones, comienza un viaje estrepitoso digno de un safari. En este aspecto, Bestia logra maquillar todos sus errores para conseguir una película que cumple.
Bestia, que se estrena este jueves 11 de agosto, es una entretenida películas de sobrevivencia y duelo.
*Crítico de cine. Colaborador de CinEspacio24.
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