Uncut Gems, dirigida por los hermanos Safdie, es una gran película de suspenso, sobre un joyero que vive al limite entre apuestas y deudas; con una increíble actuación de Adam Sandler.
Por Martín L. González* Los premios Oscar no son el mejor parámetro para medir la calidad de una película. Erróneamente, en más de una ocasión se ha afirmado que el sólo hecho de tener una nominación en cualquier categoría a los premios de la Academia, es sinónimo de calidad; y es por la enorme atención que genera esta ceremonia que grandes películas pierden mucha relevancia al no estar presentes en la fila de las competidoras, aunque lleguen a ser mejores que muchas de las aspirantes a dicho premio. Es el caso de la película Uncut Gems, la cual se desarrolla en el año 2012 en Nueva York, Estados Unidos, donde trabaja Howard Ratner (Adam Sandler), un vendedor de joyería adicto a las apuestas y que tiene deudas por todos lados. Un día llega a su tienda Kevin Garnett ( KG, el famoso basquetbolista que jugó para los Celtics de Boston de 2007 a 2013) en busca de un reloj para comprar, pero a la par llega a la tienda un ópalo que Howard lleva esperando por meses, pues él calcula que su precio ronda el millón de dólares, dinero suficiente para saldar sus deudas. Howard decide mostrarle el mineraloide a KG, quien se enamora de dicho producto, pues cree que tiene propiedades mágicas. Tras una pequeña discusión, Howard termina por prestarle el ópalo a Garnett por una noche, sin saber que esto arruinará todos sus planes. Los directores, los hermanos, Josh y Ben Safdie nos entregan una cinta increíblemente irritante, siendo esto un cumplido. La película tiene como protagonista a un hombre que vive al límite debido a sus problemas con las apuestas y las deudas que tiene con personas que no son precisamente amigables, y esto provoca que la cinta nos haga sentir ansiosos. Usando todos los recursos disponibles, consiguen meternos a la psique del personaje principal y transmitirnos su desesperación, bombardéanos con discusiones incómodas, saturación de sonido , tomas cerradas y situaciones agobiantes. El ambiente está tan bien logrado que en más de una ocasión queremos parar la película por lo incómodo que nos hace sentir. Adam Sandler por su parte hace un trabajo extraordinario, ya que aporta mucho para conseguir lo que los cineastas tenían en mente. Con una actuación excepcional, Sandler logra sacar a flote sus mayores habilidades histriónicas, llevándolas más allá de recitar monólogos de manera correcta, pues su lenguaje corporal es lo que termina de darle forma a Howard. Esa sutileza de siempre mantenerse con la cabeza baja o de no ver a las personas a lo ojos, aportan más al personaje que todos sus diálogos. El hecho de que Adam Sandler tenga el papel protagónico es un acierto más, ya que en teoría Howard es un tipo detestable al que fácilmente podríamos odiar, sólo que el carisma natural de Sandler consigue que nos preocupemos por él y que suframos con lo que le sucede, pues a pesar de todo es una persona como nosotros que sólo quiere lo mejor, al menos para él. Pero la base de toda la cinta es esa enseñanza tan marcada que nos muestra que el poder y la ambición pueden cegarnos. Utilizando el ópalo como un medio para representar esto de manera física, el filme nos hace cuestionarnos hasta donde seríamos capaces de llegar por el hambre de poder. Sin duda Uncut Gems es una cinta que no tiene que demostrarle nada a nadie, y que a pesar de ello, no debe envidiarle nada a las nominadas a los Oscar, pues sin duda se encuentra al nivel de las cintas en competencia.
*Colaborador CinEspacio24
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