Una sociedad es más democrática cuando tiene un periodismo plural, libre y sin censura; ese es el tema de la nueva cinta del multi-premiado director Steven Spielberg, The Post, que narra la decisión que tuvo que tomar Kay Graham, dueña y editora del periódico Washington Post, sobre publicar unos documentos del Pentágono que incriminaban al gobierno estadounidense sobre la guerra contra Vietnam.
Por Arturo Brum Zarco* Estamos en la época donde gobernaba el presidente Richard Nixon (sí aquel del Watergate, otro caso relevante donde el periodismo de investigación fue pieza clave). Al diario The New York Times le llegan unos documentos confidenciales del Pentágono sobre la guerra de Estados Unidos con Vietnam; en ellos, vienen declaraciones, reportes y análisis sobre lo que pensaban diferentes presidentes acerca de dicho problema bélico. En general los documentos demostraban que el ejército estadounidense estaba perdiendo la guerra; pero no querían demostrar debilidad. Después de analizar y verificar los datos de los documentos, los periodistas de The New York Times , junto con su editor, deciden publicar varias notas reveladoras sobre la “absurda” guerra contra el pueblo vietnamita. Nixon (quien solo aparece su sombra en la cinta), se molesta y consigue que un juez obligue al periódico neoyorquino a detener las publicaciones, ya que según el gobierno atentaban contra la seguridad nacional. Al periódico no le queda de otra que dejar de publicar. Este evidente ataque a la prensa es retomado por el Washington Post, que en ese momento por cuestiones económicas entraba a la bolsa de valores, es decir, comenzaba a vender acciones. Al frente de este diario estaba Kay Graham (Meryl Streep), una mujer de la alta sociedad, amiga cercana de varios políticos que tuvieron que ver con la mentira sobre Vietnam. El editor en jefe era Ben Bradlee (Tom Hanks), quien gracias a la investigación de sus reporteros consigue los documentos. Aquí aparece el conflicto: Kay es amiga de varios de los culpables y si publican notas sobre los documentos ella y sus reporteros pueden ir a juicio y ser encarcelados, junto con los editores y periodistas de The New York Times. The Post es una cinta que muestra, sí bien de una forma dramática (al fin es una película de Spielberg), lo importante del periodismo libre, de la investigación periodística, de que el periodismo debe estar alejado de los intereses del gobierno. La cinta consigue su objetivo, que es demostrarnos hasta donde los políticos poderosos intentan callar al periodista. Este tema queda a la perfección en el contexto actual, ya que el presidente del vecino país del norte, Donald Trump, no se ha cansado de culpar a los periodistas por publicar, según él, notas falsas. Por parte de México, la película puede significar cosas más profundas, ya que en nuestro país no nos demandan, nos matan y esa reflexión debe quedar en el espectador. Un periodismo libre y con rigor periodístico es necesario para cualquier país. Spielberg logra atraparnos con sus clásicas escenas de misterio, espías e intriga; y una dirección adecuada y con buen ritmo. Además de contar con las actuaciones impecables de dos de los mejores actores de Hollywood, Tom Hanks y Meryl Streep. En tiempo de la era Trump, esta cinta es una bofetada al trato que ese señor ha tenido hacia los medios. Este conflicto que tuvo el Washington Post y The New York Time contra el gobierno de Nixon está más presente que nunca, ya que en tiempos de incertidumbre política y social tanto el lector como el periodista deben exigir una prensa libre. Por esta cinta Meryl está nominada, una vez más, al Oscar como Mejor Actriz y el filme a Mejor Película.
*Periodista y realizador. Director y Editor en CinEspacio24 Noticias. Colaborador en Cio Noticias y Oculus Todo el Cine.
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