Los tres capítulos de la quinta temporada de Black Mirror quizá son los de más baja calidad de la serie, ya que el debate moral sobre tecnología y la naturaleza del ser humano quedan en segundo término.
Por Arturo Brum Zarco * El primer capitulo de la tercera temporada de la serie de ciencia ficción Black Mirror, titulado Nosedive, protagonizado por Bryce Dallas Howard, narra un mundo donde la importancia o jerarquía de las personas se mide por el puntaje que reciben de una aplicación, es decir, con un teléfono celular la gente se califica entre sí y mientras más menciones positivas tengan, mayor posición social tendrá. De esa forma, el capítulo termina, más que con una anécdota o metáfora, con una reflexión hacia el espectador, para abrir el debate sobre los niveles sociales y el poder que tendrá la tecnología en este rubro. Las cuatro temporadas de Black Mirror se caracterizan por tomar un tema de interés público y combinarlo con un mundo futurista donde los avances tecnológicos influyen en él. Así, ningún capitulo recae hacía el bien o al mal, todos “encuentran” su punto medio para dejar que el espectador con base en su propia ética decida si el actuar de los personajes estuvo bien o mal. Una de las mayores virtudes de esta serie de ciencia ficción es que cada capítulo es una discusión sobre la moral, las decisiones del hombre y las ventajas y desventajas que nos puede traer los avances científicos. Blcak Mirror nos confronta a vernos en un espejo futurista, donde no hay buenos ni malos, y donde el poder de la tecnología rige el quehacer del ser humano, algo que quizá ya es una realidad. La quinta temporada de la serie, que tiene tres capítulos, quita la esencia que caracterizó a Black Mirror: producir ese impacto moral y reflexivo en el espectador. Si bien sí abordan la tecnología y la ciencia ficción, lo hacen de una forma banal y con historias sin mucha profundidad. El primer capítulo de la quinta temporada, Striking Vipers, protagonizado por Anthony Mackie (Avengers: Engame), aborda el aburrimiento de la cotidianidad en una pareja; Dany (Mackie) es un hombre que va a cumplir 40 años, está casado y tiene un hijo, y su esposa, Theo (Nicole Beharie) quiere un bebé más. Cuando aparece el mejor amigo de Dany, Karl (Yahya Avdul-Mateen II), este le regala un juego de peleas donde por medio de un dispositivo que se pone en la cabeza, su mente entra a un mundo donde se convierte en el personaje del video juego, ahí Dany encontrará un lugar para “matar” su aburrimiento, pero de una forma sexual. Si bien el argumento es interesante y el ambiente del capítulo es lúgubre, su final no invita a la reflexión. El segundo, llamado Smithereens, es un capitulo con un agradable suspenso, pero es más un llamado a que no uses tu teléfono mientras manejas. Protagonizado por Andrew Scott y Topher Grace, narra como un conductor de Uber secuestra a un empleado de una empresa de redes sociales, y amenaza con matarlo si no lo comunican con el dueño y creador de dicha institución. El último capítulo de la temporada es quizá el que menos comparte la esencia de Black Mirror, parece más una teen movie, con sus aventuras irreales y sus juegos infantiles que una aproximación a un debate real sobre la moral y la tecnología. El capítulo se llama Rachel, Jack and Ashley, actúa la cantante y actriz Miley Cyrus, y cuenta dos historias; la primera es sobre dos hermanas que son muy diferentes, a una le gusta el rock y a la otra el pop y su gran ídolo es Ashley O; la segunda, nos narra la vida de la artista Ashley O, quien vive bajo las órdenes de su tía, que la obliga a cantar canciones que Ashley no quiere. Las dos historias se unirán gracias a un juguete, un pequeño robot que habla y canta como Ashley O. Quizá sea la peor temporada de todas, ya que no tiene esos clásicos conflictos morales que son como una “cachetada” hacia el espectador; en este caso no rompieron el espejo.
*Periodista y realizador. Director y Editor en CinEspacio24 Noticias. Colaborador en Cio Noticias.
Deja un comentario
Sé el primero en comentar en «Quinta temporada de Black Mirror, ¿la peor?»