El hoyo, ópera prima de Galder Gaztelu – Urrutia, es una película española sobre una cárcel que está dividida en niveles, donde los primeros reciben un suculento y abundante banquete y los de abajo si tienen suerte comerán las sobras.
Por Arturo Brum Zarco* El hoyo es una cinta española que demuestra que una buena idea y un trabajo minuciosamente estructurado no necesita de grandes presupuestos para obtener un resultado por de más agradable. El filme nos narra una especie de cárcel que está dividida en niveles de forma vertical, y en cada nivel hay una celda donde sólo se encuentran dos personas. En medio de cada celda hay un hoyo y por ese lugar cada día llega una plataforma con un banquete, los primeros en recibirla disfrutan los alimentos a su antojo, conforme baja la comida escasea y a los últimos le llegan las sobras si bien les va. Cada mes cambian a cada prisionero de nivel, no sabemos quién los hace como si se tratara de una ser omnipresente que decide al azar que nivel les tocará. Así, vemos a los codiciosos de arriba, a los calmados de en medio y a los que sufren hasta abajo. Con un guion solido que se mueve entre los claroscuros de la condición humana, la cinta nos lleva a reflexionar sobre si ¿somos solidarios?, ¿egoístas?, ¿salvajes? o ¿amables? El filme El hoyo, ópera prima de Galder Gaztelu – Urrutia, es un cine propositivo, perturbador, honesto y con un mensaje sobre nuestra relaciones individuales y colectivas. A partir de un diseño de producción minimalista, pero no por eso anodino, sino todo lo contrario, en su puesta en escena se encuentra un mundo claustrofóbico, pero lleno de personas, que ante la necesidad de sobrevivir el interés personal parece que es el que sobresale. Es por medio de su ambientación y diseño de arte que su metáfora toma forma y encuentra el eje de lo que el director quiere decir, un ambiente que se construye a partir de colores grises y con tonos verdes, para que el espectador construya en su imaginario sus propias conclusiones. Es decir, el director edifica un mensaje claro (quizá eso le quite un poco de complejidad al filme) sobre las clases sociales: los que están arriba tienen las mejores cosas, y literalmente los de hasta abajo sólo obtienen las sobras o en el peor de los casos no reciben nada. No obstante, este mensaje que podría caer en un obviedad sale avante en la cinta gracias a su argumento donde las personas cambian de niveles constantemente; un día te encuentras entre los primeros y comes abundantemente, al otro día estas muy abajo y apenas sobrevives. Aquí está el conflicto ético de la cinta, cómo te compartas cuando estas arriba o abajo. En ese sentido, el filme puede ser una película con una premisa poco esperanzadora, donde muestra que la creación de acuerdos para una mejor convivencia es una utopía. Un filme de suspenso, ciencia ficción, terror y gore. Con una reflexión política y social clara acerca de la justicia, la inexistente cooperación humana, la violencia y la siempre difícil lucha de clases.
*Periodista y realizador. Director y Editor en CinEspacio24 Noticias. Colaborador en Cio Noticias.
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