Crítica de la película El esquema Fenicio, la nueva propuesta de Wes Anderson, quien le agrega nuevas capas a su inconfundible estilo, pues es una cinta con secuencias sangrientas y desde el punto de vista de un villano, un corrupto y peligroso empresario que quiere reconciliarse con su hija, una joven religiosa. El filme es una obra sobre redención y una crítica al capitalismo y la corrupción.
Por Arturo Brum Zarco*
El estilo de Wes Anderson es inconfundible, y lejos de ser un punto negativo, su firma característica se depura con cada filme. Su manera de representar el cine ha dado origen a un adjetivo propio: una estética «wesandersiana» que, si bien ha cautivado a miles de seguidores, también ha generado detractores que consideran su cine repetitivo y poco novedoso.
Para apreciar el cine de Wes Anderson en su totalidad, es fundamental disfrutar de su cuidada forma, pero también reflexionar sobre el fondo de sus obras. Es aquí donde sus películas trascienden la monotonía, revelando un universo amplio con temas diversos, abordados desde una perspectiva que emplea un humor satírico sutil y refinado.
Por ejemplo, en su filmografía podemos explorar conflictos familiares en The Royal Tenenbaums (2001), la búsqueda de la libertad en El fantástico Sr. Fox (2009), la memoria, el amor y las consecuencias de la guerra en El gran hotel Budapest (2014), el poder y la necesaria desobediencia en Isla de Perros (2018), la importancia de la libertad de prensa en La crónica francesa (2021) o la ciencia y el pánico que esta causa en Asteroid City (2023).
Aunque ninguna de sus películas es perfecta (nada lo es), su fortaleza reside en la equilibrada combinación de forma y fondo. Cada una, a pesar de compartir la misma estética, presenta argumentos peculiares y distintos. Es como si Anderson introdujera en una maqueta diversos ángulos sobre la naturaleza humana, adaptando cada perspectiva a su distintivo estilo.
La nueva película de Wes Anderson, El esquema Fenicio, mantiene el sello particular del director: simetría meticulosa, paneos precisos y bien delineados, una paleta de colores saturados y personajes excéntricos envueltos en un tono de soledad, melancolía y un humor irónico.
No obstante, a pesar de esta reconocible puesta en escena, en su más reciente obra incorpora elementos menos presentes en sus filmes anteriores. Ya que observamos secuencias que pueden rozar lo sangriento, y el punto de vista se centra en un villano: un peligroso y cruel empresario que hace lo necesario para cumplir sus objetivos. Esto demuestra que, aunque con calma, el cine de Anderson está en constante evolución.
En ese sentido, El esquema Fenicio es su cinta con un mensaje político más contundente. Pues a partir de la construcción de su personaje principal, un antihéroe, la película ofrece una mordaz crítica al capitalismo voraz, a la corrupción en el mundo empresarial, a la escasa moral de los empresarios y a la violencia que permea en las grandes corporaciones.
Ambientada en los años 50, El esquema Fenicio sigue la historia del empresario y millonario Zsa-zsa Korda (una destacada interpretación de Benicio del Toro). Ante los constantes intentos de sus enemigos por asesinarlo, Korda contacta a su hija Liesl (Mia Threapleton), quien está a punto de tomar los hábitos como monja, para dejarle a ella todo su dinero y posesiones.
Korda, un hombre cruel, antipático y con nueve hijos adoptados (todos aún niños), encuentra un contraste en la figura de Liesl, quien de cierta manera aboga por la bondad de su progenitor. Esta diferencia de personalidades se acentúa cuando ambos emprenden una misión para la construcción de un inmueble, que tiene como consecuencias actos violentos, negociaciones absurdas y desenlaces corruptos. Padre e hija están acompañados por el curioso y misterioso profesor Bjorn (Michael Cera, quien entra de manera brillante al mundo de Anderson por su tipo de comedia), un entomólogo noruego contratado para dar clases a los hijos de Korda.
De esa forma, muy al estilo de Wes Anderson de narrar de forma episódica, seremos testigos del viaje de estos tres personajes, por lo que el filme es una cinta sobre espionajes y humor negro. Donde también destaca el gran reparto que tiene, Willem Dafoe, Tom Hanks, Bryan Cranston, Riz Ahmed, Scarlett Johansson y Benedict Cumberbatch.
El esquema Fenicio aborda el conflicto entre un padre y su hija, buscando ser una obra sobre una posible redención. Es un filme que cumple con el inconfundible estilo audiovisual de Wes Anderson, pero que agrega nuevas capas, como una narrativa más sangrienta y un antihéroe que acentúa el filme mejor logrado de Anderson en cuanto a un mensaje crítico hacia la política y la corrupción mundial.
*Periodista y realizador. Director de CinEspacio24.
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