Crítica de Amor a primer mensaje, dirigida por Jim Strouse, quien construye una comedia romántica sobre una mujer que después de sufrir la muerte de su prometido encuentra consuelo gracias a unos inesperados mensajes de celular.
Por Martín L. González*
A pesar de lo que se piensa comúnmente, realizar una comedia romántica (romcom) no es sencillo. Al menos no lo es cuando se busca intencionalmente crear una historia conmovedora, emocional y llena de situaciones de ensueño.
Porque aun cuando se habla de lo repetitivas y absurdas que pueden ser estas producciones, debemos comprender que este género tiene la complicada tarea de cautivar al espectador y convencerlo de que el amor romántico puede ser posible.
Sin embargo, es innegable que a este género le urge un cambio, ya que los valores sociales que se promueven en esta clase de cintas se vuelven cada vez más obsoletos.
Esto provoca que las romcom busquen reinventarse y modificar los arquetipos de los personajes de estas cintas, permitiéndose crear historias interesantes que plantean dilemas sociales que no suelen ser abordadas en este tipo de cintas.
Es así que Amor A Primer Mensaje es una de estas propuestas cinematográficas que cumple la lista de una comedia romántica estándar, pero que al mismo tiempo tiene una premisa que resalta por su peculiaridad. Cabe mencionar que este filme es una nueva versión en inglés de la popular película alemana Un mensaje para ti (2016), basada en la novela homónima de Sofie Cramer.
La cinta sigue la historia de Mira (Priyanka Chopra), una dibujante de historias para niños, quien pierde a su novio en un accidente de autos, llevando a la protagonista a una fuerte depresión, incluso sus dibujos comienzan a ser cada vez más lúgubres y deprimentes.
Desesperada, Mira comienza a mandar mensajes al número telefónico que pertenecía a su difunta pareja. Pero el número ahora pertenece a Rob (Sam Heughan), un crítico de música solitario que al recibir los mensajes llenos de honestos sentimientos, se enamora ciegamente de la misteriosa persona que se encuentra al otro lado del teléfono.
La propuesta de la cinta en principio parece el repetitivo mensaje de que la gente ya no convive y que los celulares nos están alejando de las personas a nuestro alrededor, pero el enfoque que toma rápidamente la cinta nos da a entender que la historia requiere de la tecnología contemporánea para su narración.
Así, la fase del duelo que se construye en Amor a primer mensaje se contrapone con el cine de comedia romántica, ofreciendo una alternativa más fresca que sin dejar de ser un producto blockbuster, se siente novedoso e interesante.
Hacer comedias románticas tiene su ciencia y este filme que sin ser excelente cumple su propósito de entretener, conmover, divertir y además poner un tema complejo en la narración.
De esa forma, Amor a primer mensaje, que se estrena este 10 de mayo, del director James C. Strouse, es una experiencia divertida con un mensaje esperanzador, mostrando que las comedias románticas aún tienen mucho que ofrecer.
*Crítico de cine. Colaborador CinEspacio24
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