Aún hay muchos misterios y secretos alrededor del caso Watergate, ese suceso en la historia de la política de Estados Unidos que provocó la renuncia del entonces presidente Richard Nixon. La realidad supera la ficción, y seguro toda la realidad de ese caso no ha salido (y no saldrá) a la luz; no obstante, películas y libros han abordado el tema para esclarecer qué paso. El informante es una cinta sobre dicho tema, de un personaje crucial en la trama, Mark Felt (Garganta Profunda).
En mayo de 1972, J.Edgar Hoover, el fundador y director de la Oficina Federal de Investigaciones de los Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés), muere, y de inmediato el segundo al mando Mark Felt comienza a destruir todos los archivos y audios secretos que tenía Hoover (información delicada de políticos, empresarios, activistas sociales e incluso de los presidentes de Estados Unidos, es decir, altamente confidencial).
La destrucción de esos documentos fue para que la Casa Blanca, en ese tiempo liderada por el Presidente Richard Nixon (miembro del partido Republicano), no obtuviera los secretos más valiosos del FBI. A pesar de eso, todo parecía indicar que Felt sería el sucesor de Hoover, pero Nixon nombra a Patrick Gray como director, un tipo de toda la confianza del Presidente.
El nuevo director no es bien recibido, sobre todo por Felt. Mientras tanto, un escándalo de proporciones mayores va a cambiar a todo el país. La policía atrapa a unos espías en las oficinas del edificio Watergate de Washinton D.C., sede del Comité Nacional del Partido Demócrata.
Las primeras investigaciones del FBI apuntan que los espías son parte del partido Republicano y que la orden de realizar el espionaje vino de altos mandos. Cuando la investigación está en curso, Gray les informa a sus agentes que se cancelará las pesquisas al respecto.
Felt, un agente entregado en cuerpo y alma al FBI, no acepta que todo se detenga por lo que decide actuar por su cuenta, y en un juego de intrigas y secretos comparte información del caso con la prensa estadounidense, en especial con dos reporteros del Washington Post, Carl Bernstein y Bob Woodward. Así, se convierte en la fuente principal de unos reportajes que acabarán con la presidencia de Nixon.
Esa fuente por muchos años sólo se le conocía como Garganta Profunda, hasta que el 31 de mayo de 2005 un reportaje de la revista Vanity Fair revelara su identidad: Mark Felt.
La cinta El informante (Mark Felt: the man who brougt down the White House, su título original es más contundente), narra la intimidad de Felt, el cómo decidió ayudar a la prensa y en sus demonios internos al hacerlo. Interpretado por Liam Neeson, que demuestra su gran calidad para el suspenso y el juego de espías.
Pero a esta biopic y thiller político le falta suspenso, profundidad en el tema; si bien es la primera película sobre Mark, se queda corta al reflejar la complejidad de este personaje y al explicar sus motivaciones.
En ese sentido, si la comparamos con dos películas sobre el mismo hecho como Todos los hombres del presidente y Frost /Nixon, la cinta no llega a los estándares de esas películas, ya que usa recursos narrativos sin ritmo y confusos.
Dirigida por Peter Landesman (La verdad oculta) tenían un gran historia en las manos, pero la falta de claridad en la motivaciones de Felt, la hacen una cinta mediana.
*Periodista y realizador. Director de Comunicación y Editor en CinEspacio24. Colaborador en Cio Noticias.
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