«Glass», lo importante es el final – CinEspacio24

«Glass», lo importante es el final

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Glass es la última parte de la trilogía del director M. Night Shyamalan, donde narra la historia de tres personajes que tienen súper poderes. Protagonizada por Bruce Willis, Samuel L. Jackson y James McAvoy. 

Por Arturo Brum Zarco*

@arturobrum

Debe haber un giro inesperado en la historia para que sea una película con el sello de M. Night Shyamalan. No importa si se ve forzado, inverosímil o apresurado, sus cintas deben tener un final que asombre al público.

Qué importa el inicio o el clímax de la cinta, el desarrollo de los personajes o las actuaciones, para este cineasta sus finales lo son todo. La vuelta inesperada de la narración, más que su estilo parece ser su necesidad.

Esto lo vemos en su más reciente cinta Glass, el final de su trilogía (quizá) que inició en el año 2000 con El protegido y continuó con Fragmentado de 2016; cintas que narran a seres con poderes sobre naturales. Una forma peculiar y novedosa de abordar las películas de súper héroes y cómics. 

En El protegido cuenta la historia de dos hombres: David Dunn (Bruce Willis) un tipo taciturno que descubre, después de ser el único sobreviviente en un accidente de tren, que nada le hace daño; y Elijah Price (Samuel L. Jackson) un villano que sufre una condición degenerativa que provoca que sus huesos sean frágiles y al mínimo contacto se rompan, y quien está convencido que su propósito en la vida es encontrar a seres con poderes.

Por su parte, en Fragmentado narra la vida de Kevin Wendell Crumb (James McAvoy) un hombre que tiene múltiples personalidades, las cuales obedecen a la Bestia (una de las tantas personalidades), un ser con la fuerza de un animal  y que tiene como objetivo matar a adolescentes que él considera impuras.

En Glass, Shyamalan une a estos tres personajes en un filme que aborda de nuevo problemas existenciales y humanos con habilidades sin parangón. Es una película de súper héroes que si bien sale de los convencionalismos no logra ser lo atractiva que se esperaba.

Han pasado 19 años y David Dunn sigue caminado por la calles y atrapando a los delincuentes, en internet hay fotos y videos de él pero nadie sabe quién es. La Bestia sigue libre y de nuevo, como en la cinta Fragmentado, ha capturado a varias jóvenes a quien cree impuras.

David encuentra a la Bestia y comienza una pelea que termina con el arresto de los dos, y los llevan a un centro psiquiátrico, donde también se encuentra Elijah Price.

Dicha institución es dirigida por la doctora Ellie Staple (Sarah Paulson), quien no cree que ninguno tenga poderes especiales e intenta convencerlos  que sus actos son productos de alucinaciones y problemas mentales.

Por su puesto las cosas se saldrán de control y veremos lo que en realidad pueden hacer estos tres peculiares súper héroes o villanos; y llegarán no una sino varias sorpresas. De nuevo el final lo es todo.

A diferencia de las dos primeras cintas de esta trilogía en Glass el ambiente es diferente. Tanto en El protegido y Fragmentado había colores sombríos, escenas melancólicas, secuencias de terror, personajes bien estructurados, que hacían de las cintas, además de entretenidas, un decente producto cinematográfico.

En Glass el director se va por un fotografía más clara, personajes absurdos, chistes baratos y escenas irrisorias ; como si la película tuviera mucha prisa para enseñar lo más importante: los finales inesperados.

 

*Periodista y realizador. Director y Editor en CinEspacio24 Noticias. Colaborador en Cio Noticias y Oculus Todo el Cine.

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