«El robo perfecto», policías malos y ladrones buenos – CinEspacio24

«El robo perfecto», policías malos y ladrones buenos

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El cambio de roles es la historia principal en El robo perfecto (Den of thieves), cinta en la que los policías son una pandilla más que resguarda su territorio de otros grupos criminales. Esta pandilla está liderada por Nick Flanagan (Gerard Butler), quien es un policía desaliñado, agresivo y al frente de una camarilla de miembros anti asaltos.

 

Por Carlos Ramírez García*

@carloshrgarcia

En medio de tal circunstancia, un grupo de ladrones experimentados, comandados por un ex marine llamado Merriman (Pablo Schreiber), lidia con esta autoridad al cometer distintos asaltos a bancos en la ciudad de Los Ángeles.

La ópera prima de Christian Gudegast (escritor de Objetivo: Londres, 2016) contextualiza al espectador desde su inicio con la siguiente información: “2400 veces al año, 44 veces a la semana, cada 48 horas hay un asalto en Los Ángeles”.

Ante lo anterior, la “lluvia de balas” no tarda en llegar en la primera escena de un asalto a un banco. Equipo militar, autos blindados, un hacker a distancia; El robo perfecto homenajea su nombre con estas características, en la que demuestra que los asaltantes dirigidos por Merriman son unos expertos y realizan sus robos a la perfección.

Esto contrasta, en absoluto, con la policía de Los Ángeles que lidera Nick, ya que su actitud rebelde, su poco cuidado de la escena del crimen y su egoísmo obstaculizan el trabajo de investigación. Con problemas familiares, infidelidad, y su alcoholismo que va en aumento, Nick se refugia en su trabajo por medio de actitudes violentas. Por lo que no es un policía convencional.

Al contrario, Merriman es un ladrón impecable que se esmera por cuidar cada detalle de los asaltos que comete. No toma riesgos y su código de ética es no asesinar personas en la medida de lo posible. Además, se preocupa por su pandilla.

En esta discrepancia, ambos grupos tienen algo en común: un soplón, Donnie (O’Shea Jackson Jr.). Donnie es un chico que maneja cual bólido y es el nuevo conductor de la banda de Merriman. Sin embargo, la investigación de Nick atrapa rápidamente al muchacho y lo hace su miembro encubierto.

Con esta “bomba de tiempo” al interior de ambos grupos, corre el verdadero interés de la película: la ejecución del robo perfecto. Luego de una hora y media de charlas, problemas familiares e investigación llega el golpe final que le da el título a la cinta.

Y aquí es donde el cambio de roles llega a confirmarse: ¿Quién es el malo? ¿El policía alcohólico que engaña a su esposa con strippers o el ex marine que asalta bancos en favor del bienestar de su pandilla?

Este dilema moral se traduce en la clásica persecución de policías y ladrones que termina sin trascender y falla en sus actuaciones sin matiz alguno. Pese a que el final es súbito y sorprendente en su resolución, El robo perfecto es un filme que hace a un lado la acción para centrarse en el choque de dos personalidades, dos hombres, dos grupos, dos pandillas.

 

*Periodista. Colaborador y reportero de CinEspacio24.

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